Efecto de Contraste

El efecto de contraste es la tendencia a añadir o reducir el valor de las personas/objetos que percibimos al compararlos con otro sujeto.

Este sesgo puede distorsionar la forma de evaluar a una persona cuando se encuentran con alguien por primera vez durante una entrevista de trabajo. Los entrevistadores/as pueden comparar subconscientemente a la persona que está entrevistando con el candidato/a anterior. Si el candidato anterior era particularmente bueno, puede hacer que el candidato actual se vea particularmente mal, o al revés. 

El efecto de contraste puede impactar enormemente el proceso de selección, siendo clave el lugar que ocupa el candidato en la agenda de entrevistas si no se limita la influencia de este sesgo. 

Para disminuir este efecto, se puede crear entrevistas estandarizadas donde las mismas preguntas se preguntan en el mismo orden a todos los candidatos/as, haciendo preguntas situacionales y evitando hacer preguntas que no estén relacionadas con el puesto. Implementar estas soluciones puede ayudarnos a reducir nuestros prejuicios cuando necesitamos calificar a otros y comparar a los candidatos/as de una manera más objetiva.

Cuando somos conscientes de que existen estas tendencias, reducimos el impacto de los sesgos en nuestros juicios. Desarrollando autoconocimiento de nuestros prejuicios nos ayuda a ser más eficaces en el lugar de trabajo y a proporcionar evaluaciones más justas.